La situación entre ambos países hoy día
Los iraníes que viven en Gran Bretaña tienen temor de que la última tormenta diplomática entre Londres y Teherán tensen los lazos con sus familiares en Irán y amenacen las enraizadas relaciones culturales y comerciales entre ambos países.
Las crecientes tensiones que se han venido dando últimamente a causa del programa nuclear de Irán tocaron un punto máximo la semana pasada cuando manifestantes tomaron la embajada británica en Irán, un ataque que Teherán, por su parte, dice fue realizado por estudiantes enfurecidos.
Por su parte, Gran Bretaña devolvió el ataque, acusando a Teherán de apoyar claramente a los atacantes y echando al embajador iraní en Londres.
Es muy común observar en un restaurante italiano en el oeste de Londres, a los clientes y su personal que discuten sobre la disputa por el ataque a la embajada y el cierre de la misión diplomática iraní en Gran Bretaña, entre distintas comidas tradicionales.
Muchos iraníes que han vivido en Gran Bretaña por mucho tiempo, hoy día evitar salir del país por temor de no poder ingresar nuevamente. También, muchos de ellos temen decir su apellido por temor a una represalia contra ellos o sus respectivas familias.
La desconfianza hacia los británicos es profunda en Irán, donde Gran Bretaña es apodada «viejo zorro» debido a la visión de que aún manipula los asuntos internacionales.
Si hacemos un poco de historia, el rol de Gran Bretaña en el golpe de Estado de 1953, que derrocó al popular primer ministro iraní Mohammad Mossadegh, está grabado en la memoria colectiva de los iraníes de hoy día.
El ataque de la embajada británica la semana pasada, a la que su embajador describió como «vandalismo rencoroso y sin sentido», ha dejado a muchos en el limbo, tanto en Gran Bretaña como en Irán.
Otro tema que también es muy preocupante es el de aquellos individuos de nacionalidad iraní que necesitan renovar sus pasaportes en Gran Bretaña, actualmente ellos no saben a qué lugar deben dirigirse.
Si la embajada iraní en Londres permanece cerrada, una opción sería ir a otro país que tenga una sección de intereses iraní, similar a lo que ocurre con los estadounidenses-iraníes que solicitan pasaportes y partidas de nacimiento en la embajada pakistaní en Washington.
Otra solución posible es usar la misión iraní en Irlanda para que represente a los iraníes en Gran Bretaña.
La escalada en las tensiones ocurrió después de que Gran Bretaña aplicó el mes pasado sanciones contra Irán luego de un reporte crítico de la Agencia Internacional de Energía Atómica por el programa nuclear iraní.
Muchos países, así como es el caso de Gran Bretaña, Estados Unidos y otros aliados europeos sospechan que Irán está intentando desarrollar armas nucleares de manera encubierta, una acusación que la república islámica niega, diciendo que quiere energía atómica para generar electricidad y otros fines pacíficos.
Con este panorama, la situación entre ambos países hoy en día se ha puesto muy difícil sobre todo para todos aquellos iraníes que hoy en día viven en Gran Bretaña.